Ahora que el amigo Lucas se ha dedicado a ir contando por ahí cómo acabe siendo... lo que soy, todo el mundo se ha hecho una idea muy equivocada de mí.
Puedo ser muchas cosas... pero tonto no soy. No os parece que entre el Episodio III y el Episodio IV faltan muuuchas cosas?? Bueno, pues hoy os voy a contar algunas. Porque no quiero que os penseis que el camino del Lado Oscuro de la Fuerza es tan fácil como Yoda decía; esto es una mierda. Os lo digo yo, que de esto sé más que nadie. Ser villano nunca fue fácil, y ser un Lor Sith, menos aún.
Me di cuenta del marrón en que me había metido enseguida. Palpatine me había engañado como un tonto, había perdido a mi mujer, a mis hijos, a mi amigo y mentor... bueno, y la cara, los brazos y las piernas. Mirad a dónde me había llevado el 'Lado Oscuro'. A tener un increible parecido con el Sr. Mojon.
En el fondo de mi alma, yo me seguía sintiendo el niño que le dijo adiós a su mamá en Tatooine. Le pegué cuatro gritos a Palpatine, y me fui.
Sí, como os lo cuento. Me fui. Porque el Lado Oscuro puede parecer que mola mucho... eso de ser temido y respetado en toda la Galaxia, o el poder tener todas las jovencitas que quisiera... no significaba nada para mí.
Mi vida se había convertido en un infierno. Hasta el acto más cotidiano me recordaba todo lo que había perdido...
Pero claro, sin familia, sin amigos, sin trabajo... me vi arrastrado a la calle, a vivir entre cartones, y a mendigar para comer. Porque yo también tengo que comer, no os creais. Tengo unos accesorios para el casco que trituran filetes cosa fina.
En fin. Poco a poco, a base de voluntad, perseverancia y sacrificio, fui rehaciendo mi vida. Conseguí trabajo en un supermercado... que no era la leche, pero me permitía vivir con comodidad, y pagarme mis vicios.
Lo intenté todo para dejar atrás mi oscuro pasado. Cambié de vestuario, me compré una mascota...
E incluso llegué a hacer mis pinitos en la tele. Nunca me había pasado por la cabeza trabajar de modelo (sé que en algunas páginas guarras de esas hay modelos sin piernas ni brazos, pero... hay una línea que nunca he querido cruzar), pero me surgió la oportunidad de hacer algún que otro anuncio.
Parecía que las cosas iban mejor. Poco a poco iba recobrando la confianza en mí mismo, y las ganas de vivir. Traté de llenar mi existencia explorando nuevos horizontes. Un amigo me presentó al dueño de una Galería, y tuve la oportunidad de exponer mi arte.
Me junté con algunos amigos, y creamos un grupo de Power Metal que era la envidia de la galaxia entera. No teneis ni idea de los riffs que puedes hacer con dedos hidráulicos. Paco de Lucia, Satriani, Vai, Hendrix... Herman Li y Sam Totman... todos a la altura del betún comparados con mi virtuosismo a las cuerdas.
Me embarqué en un viaje alrededor del mundo, como el Willy Fog ese, pero con más estilo. Buscándome a mi mismo, y tratando de descubrir las maravillas del mundo, en lugar de dedicarme a destruir planetas.
Lo había conseguido. De nuevo me sentía el niño que nunca me dejaron ser. La vida, por fin, me sonreía.
Pero es imposible escapar del pasado, creedme. Por mucho que corras, por mucho que te escondas,... un día giras una esquina y zas!
Después de una noche entera jugando al WoW con los colegas, me bajo el correo y ahí está la noticia que llevaba temiendo toda mi vida: Mis hijos estaban vivos.
Tenía una hija. Una hija!
De pronto, todo comenzó a girar vertiginosamente a mi alrededor. El mundo cobró de repente un nuevo color, y ví mi futuro y mi destino claros como no los había visto jamás: encontraría a mi hija, y juntos dominaríamos la Galaxia!
Pero... ay! Está claro que estaba destinado a traer el Equilibrio a la Fuerza, y todas esas mondongas, pero también estaba destinado a tropezar dos veces con la misma piedra, y a no dar pie con bola. Caí en el grave error de volverme a juntar con Palpi, que me convenció de que sería mejor gobernar la Galaxia con mi hijo, que las mujeres se ponen muy tontas cuando les dejas mandar... Le hice caso, y,... bueno, creo que todos sabeis cómo acabó el tema.
Hacedme caso, y sed buenos. Que ser villano nunca fue fácil. Y te las dan por todos sitios.
Con cariño.
Darth Vader.
P.S. Gracias a Diego por la idea.